El pasado viernes 23 de abril el Comité Económico y Social Europeo (CESE) organizó un coloquio online para que los socios de APRI conociesen de cerca el funcionamiento de esta institución europea. Durante el coloquio virtual, los miembros de APRI tuvieron la oportunidad de familiarizarse con el funcionamiento del CESE y el papel que juega en el proceso de toma de decisiones de la UE.

El Comité Económico y Social Europeo (CESE o EESC por sus siglos en inglés) es una de las instituciones más antiguas de la UE y se creó para representar los intereses económicos en Europa. Hoy en día funciona como una asamblea con representantes de cada país—España tiene 21 representantes. Las instituciones de la UE no tienen obligación de escuchar a los representantes, sino tener en cuenta el consenso que se alcanzan en estas asambleas. Los representantes de la asamblea trabajan para llegar a un consenso respecto a los diferentes intereses en la UE, para que los legisladores sepan dónde están los intereses europeos comunes y qué tipo de oposición esperar. Hay varios representantes del APRI en los comités del CESE.

La conferencia comenzó con Beatriz Porres, Jefa de la Unidad de Visitas y Publicaciones del CESE, que explicó la institución y presentó a varios participantes.

El siguiente ponente, Juan Alfonso Herrero, vocal de la Junta Directiva del APRI y Director de Asuntos Europeos de Mercadona, habló sobre APRI y su misión, antes de dar la palabra a dos ponentes del CESE.

Georgios Meleas presentó algunos elementos sobre los planes de recuperación Post-COVID y la importancia de la democracia participativa. El CESE realizó una encuesta en todos los Estados miembros y comprobó que las organizaciones de la sociedad civil no participan al grado que esperaba la Comisión. El CESE ha sido muy activo últimamente para reunirse con los stakeholders.

Tatiana Adamisova, destacó que el CESE se trata de un órgano consultivo, y no de un grupo de presión, cuya función principal es asesorar a las tres instituciones principales de la UE: la Comisión, el Parlamento y el Consejo. Estas relaciones se formalizan mediante acuerdos y protocolos de cooperación. La pandemia no ha afectado tanto a las actividades del CESE debido a que la mayoría de los representantes viven en los Estados miembros y tienen fuertes conexiones con grupos locales de la sociedad civil. En este sentido, subrayó la importancia de una fuerte conexión con la sociedad civil y los comités nacionales de los Estados miembros.

En la segunda parte de la conferencia, los ponentes destacaron la importancia de ejercer presión en todas las fases de la legislación en la Unión Europea, de encontrar un consenso dentro de las organizaciones y de inscribirse en el Registro de Transparencia de la UE.

Benedikt Wiedenhofer, de la organización de empresarios de la UE Business Europe, explicó que hay varias herramientas de abogacía que una organización puedan utilizar. Business Europe está formada de 40 miembros en 35 países, incluidos los 27 Estados miembros, y representan a las pequeñas, medianas y grandes empresas. Entre sus prioridades se encuentran las relaciones internacionales, centradas en la política de comercio interior e inversiones de la UE, con grupos de trabajo dedicados a la OMC con diferentes prioridades regionales. Los stakeholders con las que trabajan principalmente son instituciones con sedes en Bruselas, también trabajan con embajadas y confederaciones de terceros países.

Jean-Baptiste Boucher subrayó la importancia de distinguir entre la abogacía y el lobbying antes de presentar la misión y los objetivos del Copa-Cogeca. El Copa representa los intereses de los agricultores europeos, mientras que la Cogeca representa los intereses de las cooperativas agrarias. Afirmó que es importante encontrar el nivel de consenso más alto dentro un lobby o grupo de interés y que es importante comunicar el consenso a otros para encontrar aliados comunes. Este proceso del lobbying generalmente comienza con una consulta pública en la Comisión de manera que dar “dirección a la grada en la ballesta.”

Desde el punto de vista de la Comisión Europea, Tzonka Iotzova explicó cómo se trata a los consumidores y a los lobbies, así como los procesos que se utilizan en la Comisión. Según sus comentarios, es imprescindible inscribirse en el Registro de Transparencia si un lobby o grupo de interés quiere ser escuchado o unirse a un grupo de expertos.  

Lorenzo Repetti, en representación de Confederación de Sindicatos de la UE, que representa a más de 45 millones de trabajadores, volvió a destacar en la importancia de negociar a todos los niveles.

Por ultimo, Felipe Medina, miembro del CESE concluyó con comentarios sobre la comunicación, el consenso y la búsqueda de puntos comunes. En Bruselas, “si no eres una de las personas que almuerza en la mesa, eres la comida” de esta manera el CESE puede permitir un espacio para comprometerse con los temas que se sirven en la mesa.