OECD: “El lobbying puede proporcionar a los responsables de la toma de decisiones información y datos valiosos, así como otorgar a las partes interesadas acceso al desarrollo e implementación de políticas públicas ”

¿Qué es el lobby?

El lobby es una actividad desarrollada desde empresas hasta pequeñas asociaciones u ONGs. A nivel empresarial la actividad del lobby la desarrollan por regla general los sectores más regulados.

Desde su primer artículo, la Constitución diseña un modelo de Estado social y democrático de derecho, que propugna como valores superiores la libertad y el pluralismo político; un proyecto de democracia no solo basada en la representación, sino también en la participación directa de los ciudadanos en los asuntos públicos.

Los grupos de interés desempeñan un papel importante y legítimo en el proceso democrático. Es un derecho fundamental que los representantes de la sociedad civil tengan acceso a las Instituciones y de forma muy especial a los poderes ejecutivo y legislativo a fin de comunicar sus ideas e intereses, recabar información, defender su situación o instar a cambiar la legislación que les afecta.

El lobby es una actividad profesional que se centra en la defensa de intereses legítimos ante los distintos ámbitos de la toma de decisiones públicas. Trata de trasladar la Administración Pública y distintos partidos políticos la posición e intereses de una organización, trabajar para que esos intereses formen parte del debate y sean tenidos en cuenta y conseguir que la normativa beneficie y no perjudique los intereses de la organización o colectivo.

¿Para qué sirve el lobby?

  • Permite la participación en el proceso de toma de decisiones públicas.
  • Mejora la interlocución del Gobierno con los representantes de la sociedad civil.
  • Facilita a los decisores información técnica y sectorial para su labor legislativa.
  • Promueve el debate público sobre asuntos diversos.
  • Ayuda a las empresas a estar informadas y a conocer las prioridades públicas.

¿Qué sectores hacen lobby?

¿Por qué se llama lobby?

El término inglés significa literalmente “vestíbulo”. Sin embargo, su acepción como “grupo de presión” partió de un vestíbulo concreto, el que en 1640 comunicaba la Cámara de los Comunes con la sala central del antiguo palacio de Westminster. En él, los parlamentarios británicos recibían y comentaban mensajes e informes de las fuerzas sociales antes y después de las sesiones. Una costumbre que se ha mantenido en el Westminster actual.

El término «lobby» apareció por primera vez en la prensa estadounidense de 1820 y describía a los miembros del Senado que se relacionaban en el vestíbulo del edificio con los miembros de la Cámara de Representantes para aprobar una determinada legislación.

Una famosa historia afirma que el término surgió en el Willard Hotel de Washington D.C. Narra que el presidente Ulysses S. Grant usó la palabra para describir a las figuras políticas que frecuentaban el vestíbulo del hotel, y cómo invitaban a bebidas al presidente para intentar influir en sus decisiones políticas.

No obstante, en un informe de la BBC, un historiador mostró que el término tiene sus orígenes en las reuniones de los miembros del Parlamento y sus colegas en los vestíbulos («lobby») de las Cámaras británicas antes y después de los debates parlamentarios en los que el público puede reunirse con sus representantes.

El lobby no es cohecho ni poder en la sombra


Decir lobby en España sigue siendo sinónimo de poder en la sombra. Esto se debe en parte a la mala imagen transmitida por Hollywood de esta simple interlocución entre sectores de la sociedad civil y los legisladores y gobernantes.

Investigadores de la Universidad de Harvard tras haber investigado a los lobistas durante casi un año, llegaron a la conclusión de que los lobby no es cohecho. Resumieron qué hace a los lobistas tan influyentes en dos frases:

“Al contrario de la equivocada idea pública, el día a día de los lobistas de las firmas no está lleno de fiestas glamurosas y de trastiendas envueltas en humo donde los lobistas politiquean en transacciones quid pro quo de dinero por políticas. En cambio, los lobistas centran su atención profesional en pulir el arte de entablar relaciones, principalmente con miembros del equipo de gobierno, pero también con clientes potenciales, coaliciones y otros individuos y organizaciones relacionadas con las áreas de trabajo de sus clientes”

En su lugar, concluyeron en que los lobistas se ganan la influencia al construir y mantener relaciones con legisladores y miembros de su equipo. Así, podrían usar estas relaciones para influir a dichos legisladores y que apoyen problemas de su interés e importancia.

El lobbying se puede entender por lo tanto como actividad cuyo objeto es mejorar las decisiones políticas a través de la percepciones realistas de empresas, asociaciones o colectivos de ciudadanos.

El Lobby en la UE

En la Unión Europea, los lobbies buscan “influir en los procesos de elaboración de políticas” en sus instituciones. Los grupos que define la Comisión se dividen en tres ramas: las consultoras profesionales y despachos de abogados; los lobbistas de empresas y asociaciones comerciales; y los think tanks (o fábricas de ideas) y ONG