La gestión de los asuntos públicos y las relaciones institucionales están ganando protagonismos ante esta crisis sanitaria, económica y social. Esta nueva actividad puede coger un nuevo impulso y recobrar importancia. Así lo han manifestado los miembros del Foro Empresarial en el debate de APRI celebrado el pasado 23 de abril sobre ‘Asuntos Públicos y Relaciones Institucionales ante la crisis Covid-19’ en el que han participado Yolanda Vega, Directora Asuntos Públicos en Burson Cohn & Wolfe; Marian Casado, Directora General de Deva; Javier Herrero, Director del Área de Asuntos Públicos y Relaciones Corporativas de Evercom; Carlos Ochoa, Responsable de Asuntos Públicos FTI Consulting; Montse Escudero, Directora de Asuntos Públicos en Omnicom; Javier Valiente, Socio Director de Political Intelligence; Diego Bayón, Director Asociado del área de Asuntos Públicos en Kreab y Javier Dorado, Director de Asuntos Públicos de Weber Shandwick.
FTI Consulting Spain comunica hoy dos incorporaciones a su equipo, que refuerzan la oferta de servicios de FTI en la práctica de energía, liderada por Blanca Perea.
Yeray Pérez se incorpora como Senior Director y cuenta con más de 15 años de experiencia en consultoría económica en empresas como The Brattle Group, AFRY y NERA. Tiene una amplia experiencia en los sectores de electricidad y gas dentro y fuera de España, asesorando a utilities, fondos de inversión y entidades reguladoras. Yeray se ha especializado a lo largo de su carrera en la aplicación del análisis económico a la regulación, al análisis de riesgos, al diseño del mercado, a la política de competencia y a procesos de arbitraje. Es licenciado en Economía y estudió el Máster de Organización Industrial de la Carlos III.
Igualmente, Carlos Ochoa, viene a reforzar la práctica de Energía como responsable de Public Affairs en el equipo de Comunicación Estratégica, que dirige Juan Rivera. Carlos se incorporó a FTI en Madrid hace más de medio año, si bien dedica una parte importante de su tiempo a liderar proyectos de corte regulatorio en Bruselas, donde ha trabajado los últimos 10 años.
Ochoa combina su excelente conocimiento de las políticas europeas y de los procesos políticos e institucionales de la UE con su experiencia asesorando a clientes españoles y globales relacionados con la Energía, el Clima, el Transporte y el Medio Ambiente. Carlos es licenciado en Derecho y cuenta con un Máster en Estudios Europeos por la Universidad ULB de Bruselas, así como un Máster en Administración de Empresas por la Universidad CEU de Madrid.
Blanca Perea ha comentado “Yeray y Carlos son dos profesionales que han dedicado su carrera al sector energético y medioambiental y aportan ángulos complementarios a nuestra oferta global. En la actualidad el sector energético está viviendo una profunda transformación y la resiliencia será un factor determinante, especialmente en ámbitos regulados como este sector. Nuestra vocación y misión persigue precisamente apoyar a las empresas a gestionar el riesgo, el cambio o la litigiosidad desde una perspectiva financiera, regulatoria, económica, legal y reputacional, todo ello de forma integrada”
Sobre FTI Consulting
FTI Consulting, Inc. es una firma global de consultoría dedicada a ayudar a las organizaciones a gestionar el cambio, mitigar el riesgo y resolver disputas: financieras, legales, operativas, políticas y regulatorias, de reputación y transaccionales. Con más de 5.000 empleados en 27 países, los profesionales de FTI Consulting trabajan en estrecha colaboración con los clientes para anticipar, asesorar y superar los complejos desafíos empresariales y aprovechar al máximo las oportunidades. La Compañía generó $2,353 millones en ingresos durante el año fiscal 2019. Para más información, visite www.fticonsulting.com y en Twitter (@FTIConsulting), Facebook y Linkedin.
Juan Torres, fundador de Deva, tesorero de APRI y enfermo de COVID-19.
Soy un pésimo profeta. Jamás se me ha dado bien adivinar el futuro, ni siquiera esbozarlo, y por eso no me gusta el afán generalizado de especular sobre el porvenir. No son los demás los que se equivocan: soy yo el incapaz de acertar.
Y eso me ha pasado siempre, incluso en tiempos normales -si es que alguna vez los ha habido. Cuánto más ahora, en pleno reinado del coronavirus, cuando, con medio mundo encerrado en sus casas y la actividad empresarial prácticamente paralizada, ni los más avezados profetas se atreven a jugársela.
Ni idea, pues, de lo que nos espera, ni idea de cómo será el mundo después del Covid-19.
Pero hay un par de ideas que me rondan la cabeza y en torno a las cuales quiero articular estas líneas. (Dos ideas, en estos tiempos de incertidumbre, a mí me parecen muchas).
La primera: si algo ha demostrado esta crisis terrible y demoledora es que los poderes públicos tradicionales han quedado en evidencia y han dejado bien a las claras su debilidad. El andamiaje del Estado nacional burgués, tan útil para las sociedades de los siglo 19 y 20, no aguanta ya la complejidad de los nuevos tiempos.
Lo hemos visto con otros retos: con la globalización, con las nuevas tecnologías, con la crisis climática. El Estado se basa en la existencia de fronteras, y ni el dinero, ni la migración, ni internet, ni el clima quieren saber nada de límites. ¡No digamos los virus!
De manera que el Estado, perplejo, noqueado, se deshilacha y se desmorona.
Lo que pasa es que los ciudadanos siguen estando representados por él, siguen estando gestionados por él, siguen bajo su cobijo. El parapeto constitucional -en el caso de España y de los demás países democráticos- sigue siendo garantía de libertad y de juego limpio. Nos interesa que el Estado se sobreponga.
Primera paradoja: un Estado obsoleto jugando a proteger.
Segunda idea: Una sociedad muy compleja, muy líquida, extremadamente frágil, aquejada de riesgos y de expectativas enredadas y disímiles. Nunca las soluciones fáciles han sido posibles, menos lo son ahora, y sin embargo, a muchos les gustaría…
Una sociedad desestructurada, en la que prácticamente solo el tejido empresarial revela un cierto esqueleto, junto a algunos esfuerzos asociativos y a voluntariosas iniciativas…
La segunda paradoja: empresas golpeadas por una crisis brutal están obligadas a reconstruirse y a reconstruir con ello el tejido social.
Conclusión: Un Estado débil frente a unas empresas debilitadas. Es inevitable el entendimiento, el diálogo, la búsqueda de soluciones… Hay que reconstruirlo todo, desde el principio.
Y los lobistas somos, por encima de todo, los alfareros del diálogo. Alfareros: artesanos, constructores manuales de un encuentro inevitable, pero a veces costoso, entre los dos polos de la reconstrucción.
Tenemos que sentarlos a hablar, tenemos que obligarlos a hablar: a las empresas y a los poderes públicos, a los emprendedores y a las instituciones, a los que crean riqueza y a quienes la administran.
No hay otro modo de salir adelante. Y los lobistas estamos obligados a empujar.
Conversando con el Profesor Enrique Sueiro, sobre las potenciales sinergias de trabajar en común entre profesionales de las RRII y los Dircom
Irene Tato, consultora de RRII en el IIDC, vicepresidenta de Amref Salud África y miembro de APRI
Varios miembros del grupo de trabajo de APRI Salud, hemos tenido la suerte de disfrutar hoy miércoles 8 de abril de un encuentro virtual muy pedagógico con un experto de la comunicación corporativa en épocas de crisis como es Enrique Sueiro. Generosamente nos ha compartido algunas píldoras de conocimiento en gestión de comunicación de las organizaciones. Emplazamos a este reconocido autor, consultor y profesor a compartir algunas lecciones o aprendizajes que deberíamos extraer de las circunstancias que estamos viviendo, y celebramos aceptase el reto porque esta tarde nos ha invitado a redescubrir algunas máximas que -sin duda- nos ayudarán en la gestión de nuestras tareas prioritarias.
“Gracias Enrique por recuperar para nosotros tanto sentido común y poner la brújula hacia el norte”. Enrique, – me permito el tuteo porque él sabe que se encuentra entre mis amigos personales-, escucharte nos ha ayudado a comprender muchas cosas y solo comprendiendo primero estamos en una mejor situación de poder hacernos comprender nosotros mismos después” como dices. Así que en nombre mio y – creo que hablo por el nombre del grupo también- muchas gracias por estas pinceladas de realidad, rayos de sabiduría que tomamos con prudencia y cautela siguiendo tus consejos, pero que estamos seguros nos ayudará a ser más efectivos en nuestro trabajo.
De todos los mensajes intercambiados en nuestro encuentro con el profesor Sueiro, he recogido algunas ideas para trasladar a todos los profesionales de las Relaciones Institucionales a través del Blog de APRI.
Os invito a abrir un debate si lo estimáis oportuno.
1. La situación que estamos viviendo no puede ser más difícil, nadie habíamos vivido nada igual. ¿No vamos a aprovechar este desafío extraordinario para plantearnos modificar nuestras presunciones? ¿Acaso no estamos abocados a transformar el modo en que venimos trabajando? Yo creo que la realidad se nos impone a la fuerza. Directores de Comunicación y Directores de Relaciones Institucionales han de analizar conjuntamente el nuevo escenario y marcar una línea y una dirección dentro del caos. Llevamos casi un mes de Estado de Alarma y hay mucho desgaste. Quedan por delante semanas difíciles, hemos de unirnos, hemos de buscar sinergias. Tenemos la oportunidad de tomar esta crisis como una invitación a resetearnos y sacar lo mejor de nosotros mismos como personas y empresas. Como decía la Reina de Inglaterra en su reciente discurso, “Unidos venceremos” y así lo creo yo también, pero trabajar unidos nos va a exigir aquí y ahora saber priorizar y ser cautos, nunca la prudencia fue más necesaria.
2. Es evidente que toda crisis o emergencia precisa de una comunicación bien gestionada porque va a ser clave para que las audiencias den credibilidad a las medidas anunciadas y explicadas por los portavoces, pero si antes hemos hecho bien la comunicación preventiva, mucho mejor. ¿Qué quiere decir eso exactamente? Que no es momento de maximizar la velocidad, hemos de poner la brújula y no el cronómetro. Repensar hacia donde queremos ir, cómo y con quien. En momentos claves como el que estamos viviendo donde la colaboración y el consenso es más necesario que nunca, necesitamos no solo ver coordinación sino aprovecharnos de las alianzas institucionales que hemos construido en el pasado. Necesitamos poder disfrutar de personas con altura de miras para poder ocuparse de los proyectos de altura. Nuestro país, la sociedad global, está viviendo una pandemia que reclama soluciones en cada esquina y somos afortunados de poder formar parte de los que están impulsando intervenciones solidarias, todos podemos ayudar desde nuestros confinamientos. Todos podemos ser agentes activos representando a la sociedad civil, empresarial o a la administración.
3. El país necesita líderes que hablen menos y escuchen más (Es una indirecta a nuestro Presidente de Gobierno pero también a todos los portavoces que no muestran con hechos lo que anuncian sus palabras.) Se pueden trabajar mejor las intervenciones porque hay que evitar esa imagen de confusión y esas contradicciones.
4. Algunos portavoces parecen haber olvidado que TODO COMUNICA, lo que decimos y lo que no decimos, lo que hacemos y lo que NO hacemos. La importancia de saber informar sin alarmar, de ganarse la credibilidad compartiendo siempre toda la verdad, acompañando a las palabras de datos que sean bien explicados. Son tiempos difíciles, muy duros, pero la sociedad necesita conocer toda la verdad soportable a la vez que le inyectan ilusión.
Y como reflexión final, quisiera aprovechar este espacio para compartir públicamente mis mejores deseos para todos y mi sentido pésame a los compañeros que han sufrido alguna pérdida cercana. Permitirme me una al homenaje y reconocimientos a todos los profesionales sanitarios y cuidadores que están dejándose la vida (nunca mejor dicho) en esta larga batalla contra el coronavirus SARS-CoV-2. Para ellos mi total admiración.
Un fuerte abrazo a todos.
Borja de la Torre, experto en Relaciones Institucionales en Mapfre y socio de APRI
Hace unos días se conocía que Estados Unidos estaba recomprando, por 4 veces su valor original, pedidos de material sanitario que Francia había encargado a China, dejando así sin suministros de emergencia al país galo. Francia, a su vez, llevaba semanas reteniendo envíos de material sanitario con destino a España e Italia, sólo por el hecho de cruzar territorio francés. Mientras, en el seno de la Unión Europea, una parte de los Estados miembros, con Austria y Países Bajos a la cabeza, se oponían a emitir deuda europea conjunta para ayudar a los países más afectados a superar la crisis del Coronavirus, sin proponer alternativas. Por si fuera poco, instituciones internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) o la Organización de Naciones Unidas (ONU) han demostrado una incapacidad notable para articular una respuesta conjunta y obligatoria de sus Estados miembros a lo que finalmente se ha declarado como Pandemia. Estos son los ingredientes de un cóctel explosivo, que puede hacer saltar por los aires cualquier contrato social entre Estados, entre sus ciudadanos y de los unos con los otros, ya se entienda esa relación de arriba hacia abajo o viceversa.
Precisamente este panorama me hace pensar que el profesional de las relaciones institucionales cobra, ahora más que nunca, una importancia crucial, no sólo por su conocimiento de los marcos regulatorios nacionales e internacionales, por su facilidad para tender puentes de entendimiento público-privado o para comunicar los mensajes adecuados en cada momento, sino por su capacidad de contribuir a través de su trabajo y su visión estratégica a anticipar las necesidades de un país, de una región, de una comunidad que va a tener que actuar con la misma celeridad con la que ha caído en la crisis sanitaria si no quiere que el resquebrajamiento del contrato social acabe convirtiéndose en una fractura irreparable.
Esta crisis que nos deja el COVID19 va a obligar a cambiar los protocolos de acción en numerosos sectores, tanto públicos como privados, empezando por el Sanitario, lógicamente, que tendrá que repensar cómo organizar sus suministros, aprovisionamientos, gestión de personal, gasto presupuestario o coordinación público-privada, y siguiendo por el de la Seguridad, la Previsión social y económica, el e-Commerce o el tan cacareado Teletrabajo, por mencionar algunos de los más evidentes. Las relaciones institucionales tienen una oportunidad de oro para demostrar que esto no va de lobbies, que esto no se trata de hacer prevalecer los intereses de un sector, sino que se puede trabajar codo con codo, entre lo público y lo privado, de manera transversal entre distintos sectores, para que todos tengan una mejor cabida y un mayor encaje en el marco social en el que nos relacionamos a diario y que nuestras sociedades estén mejor preparadas para afrontar cualquier tipo de crisis futura, desde cualquier ámbito –local, autonómico, nacional, europeo e incluso a nivel global– y en cualquier sector.
Si la crisis del Coronavirus ha conseguido que SEAT se ponga a fabricar respiradores para pacientes con insuficiencias respiratorias, que INDITEX haya reorientado parte de su producción a la fabricación de batas y otro tipo de material textil sanitario, o que empresas de cosmética dejen de fabricar cremas y perfumes para producir geles desinfectantes, ¿por qué no se va a poder aprovechar esa capacidad de entendimiento transversal para reordenar y mejorar la forma en la que se relaciona lo público con lo privado y los sectores entre sí?
Solo si conseguimos que la sociedad perciba nuestro trabajo como un valor añadido a sus vidas –y no como una lucha continua de intereses particulares–, solo así conseguiremos que la profesión, entendida como un todo integral, se convierta en uno de los pegamentos sociales más importantes, cuya labor contribuya a mantener la cohesión y el equilibrio social necesarios para reforzar el contrato social y que la solidaridad institucional no se resquebraje, favoreciendo que las organizaciones salgan más reforzadas de esta crisis que tanto nos está enseñando.
El pasado 26 de marzo organizamos nuestro primer Lobby Hour en remoto con Fernando Mugarza y Jesús Diaz del Instituto ProPatients. Durante una hora de coloquio, en el que participaron 18 personas, coincidieron en señalar la necesidad de aumentar la participación de las organizaciones de pacientes en la estrategia y elaboración de políticas públicas, así como en los distintos comités científicos en las Comunidades Autónomas. Asimismo, pusieron de manifiesto que existe una falta de recursos y consecuente profesionalización de las actividades en muchas organizaciones de pacientes, entre ellas las relaciones institucionales. Por otra parte, intervino Carmen Peña, presidenta del Steering Committe del Instituto ProPatients, quién señaló que el Instituto ProPatients pretende ser un pulmón profesional para dar contenidos a las organizaciones de pacientes de cara a su profesionalización. Además, explicó la función que cumple el Steering Committee del Instituto ProPatients en el que participan personalidades destacadas del sector y expertos de primer nivel del entorno sanitario y sociosanitario. El Lobby Hour concluyó con una debate abierto en el que se habló sobre cómo mejorar la transparencia y profesionalización de las organizaciones de pacientes en la gestión de los asuntos públicos.
Sobre Fernando Mugarza
Presidente del Instituto ProPatients
Doctor en Medicina y Cirugía. Es especialista en Información de la Salud, y en Medicina de la Industria Farmacéutica y Experto Universitario en Responsabilidad Social Empresarial. Actualmente es director de Desarrollo Corporativo y Comunicación de la Fundación IDIS, presidente del Instituto ProPatiens, socio fundador del Communication Experience Institute, profesor de ética de la Universidad Pontificia de Comillas. Ha ocupado posiciones como director de Comunicación, Relaciones Institucionales, Desarrollo Corporativo, Marketing en diversas organizaciones e instituciones. Ha sido creador y director de varias organizaciones en el ámbito de la salud y coautor de 7 libros y varios de artículos publicados en revistas científicas y en medios de comunicación.
Sobre Jesús Diaz
Vice.presidente del Instituto ProPatients
Ha trabajado más de 20 años en la multinacional americana (Abbott) en la Dirección Nacional Ventas. Posteriormente se incorporo como socio al grupo contenidos de salud del El Global, Gaceta Médica, y la Revista Española de Economía de la salud. Ha sido secretario de la Fundación Fundamed y ha participado en la creación y desarrollo de la Alianza General de Pacientes y en la creación del Observatorio de la Adherencia (OAT), en la que se incorporó como Director General. Desde hace un año, junto con Fernando Mugarza, y Luis de Palacio, ha participado en la creación del Instituto ProPatiens; ocupando la posición de Vicepresidente. Su experiencia se extiende también al terreno de la formación de asociaciones de pacientes, ya que ha participado en la creación de la primera cátedra del paciente a nivel nacional con varias universidades públicas, y en el primer curso nacional de especialista en gestión de asociaciones de pacientes.
Sobre el Lobby Hour
Los Lobby Hour son un encuentros de networking abiertos a cualquier profesional del sector en los que se cuenta con la ponencia de un invitado de reconocido prestigio por su trayectoria profesional en el campo de los asuntos públicos.
Combinar asuntos públicos y estrategia de negocio será el gran reto de las Startups a partir de ahora. El nuevo escenario post-crisis al que nos vemos abocados, hará aún más urgente y necesario, si cabe, esta cuestión.
Agustín Baeza Díaz-Moreno, Director de la Asociación Española de Startups
El conjunto de los sectores económicos afronta un nivel de incertidumbre nunca visto en las últimas décadas. Además de la crisis sanitaria y su incalculable impacto en forma de pérdida de vidas humanas, el conjunto de la sociedad trata de hacer frente a un presente y un futuro inmediatos en el que parece que han desaparecido de golpe todas las certezas conocidas.
El sector de las startups está siendo fuertemente golpeado como buena parte de la economía. Pero además, por su propia naturaleza y por su singularidad como modelo empresarial, son especialmente vulnerables a estos tiempos de crisis. Por ello, desde la Asociación Española de Startups, hemos trabajado durante los últimos días con otros agentes del ecosistema para definir medidas y políticas públicas concretas en favor de las startups. El gobierno ya las conoce. Son medidas absolutamente necesarias para garantizar que fluya la liquidez y que ello permita a la mayoría de ellas su supervivencia. Nuestro trabajo como responsables de asuntos públicos es ser más exigentes que nunca, pero al mismo tiempo, modular de manera responsable el tono y la comunicación en estos momentos tan convulsos para todos.
Están en juego no sólo ya los puestos de trabajo y miles de empresas, sino también, la supervivencia del conjunto del ecosistema innovador y de emprendimiento que será decisivo para relanzar la economía española cuando pase la crisis sanitaria y comiencen las labores de reconstrucción de nuestra economía.
En los últimos tiempos he insistido mucho en la necesidad de que las startups comiencen a gestionar de manera adecuada y desde el primer momento los asuntos públicos. Una herramienta que cada vez será más necesaria para que las startups puedan impulsar sus modelos de negocio. Combinar asuntos públicos y estrategia de negocio será el gran reto de las Startups a partir de ahora. El nuevo escenario post-crisis al que nos vemos abocados, hará aún más urgente y necesario, si cabe, esta cuestión.
Ya lo está siendo ahora que vivimos en tiempo presente la grave crisis que afrontamos en todo el mundo. Desde la Asociación insistimos mucho en la necesidad de conciliar la defensa de intereses del conjunto del sector con los intereses generales de la sociedad. Alinear intereses es la mejor forma de defender intereses legítimos. Antes era una buena práctica, puede que a partir de ahora ese constituya en el paradigma dominante. El diálogo y la conversación que siempre es tenso, exige ahora grandes dosis de profesionalidad, de mentalidad fría, pero al mismo tiempo ser más empáticos que nunca con tus interlocutores, sometidos también a una gran tensión.
Podemos observar innumerables iniciativas del sector emprendedor en la que nuestros emprendedores y startups están aportando con lo mejor que saben hacer: salirse de la caja y ofrecer soluciones a los problemas sociales. Desde grupos de hackers y makers que están diseñando y produciendo todo tipo de material sanitario escaso (respiradores, cápsulas, etc), pasando por startups que están ofreciendo su inteligencia y experiencia en materia de data para ayudar a diseñar en tiempo récord herramientas de gestión avanzadas para luchar contra la pandemia, hasta llegar a la genuina colaboración con administraciones sanitarias en lo que estas demandan.
Todas ellas, iniciativas orientadas al procomún que demuestran una vez más la enorme contribución en forma de riqueza y de capital simbólico y productivo que genera el ecosistema de innovación y de emprendimiento. El reto será que esta colaboración público-privada se mantenga más allá del escenario presente de urgencia y de crisis de estas semanas, desatando los nudos burocráticos y de diferencia de culturas y estilos de gestión, que hasta ahora han impedido su desarrollo. Muchas cosas van a cambiar. Probablemente también en esta profesión de las relaciones institucionales y asuntos públicos. Tenemos que repensar el conjunto de nuestras ideas, empezando por nuestros tradicionales mapas de stakeholders. Una parte de la ortodoxia ha quedado atrás. Hay que construir nuevas herramientas para afrontar la nueva era en la que estamos entrando.
El 3 de marzo tuvo lugar la Asamblea General Electoral de la Asociación de Profesionales de las Relaciones Institucionales (APRI) y, como marcan los Estatutos, fue la ocasión para elegir a una nueva Junta Directiva de la Asociación de para los próximos cuatro años. En la sesión se trataron los asuntos de interés de la Asociación y fueron aprobados por mayoría todos los temas del orden del día.
La presidenta María Rosa Rotondo, el secretario Esteban Egea y la directora general Irene Matías, expusieron la memoria de actividades de la Asociación de 2019. A continuación aprobaron las cuentas 2019 y el presupuesto para el 2020. También se aprobó la cuota reducida para entidades de interés público y la estructura de la nueva Junta Directiva para los próximos cuatro años.
La Asamblea General concluyó con la presentación por parte de la nueva presidenta de APRI de la nueva Junta Directiva que cuenta con un nuevo equipo que es reflejo de todas las generaciones y perfiles profesionales de la asociación. Entre los nuevos miembros de la Junta se encuentra: Esteban Egea Sánchez, experto en asuntos públicos; Luis Suarez de Lezo Ferrer, Secretario General de la Asociación de Empresarios de Alcobendas; Juan Torres Jiménez, Fundador y Director de Asuntos Públicos de Deva; Adriana Bonezzi Pérez, External Affairs Manager en British American Tabacco; Diego Bayón Mendoza, Director Asociado de Asuntos Públicos en Kreab; Montse Escudero Pérez, Directora de Asuntos Públicos de Omnicom; Dolores Gonzalez Pastor, Gerente en la Oficina Corporativa de Regulación y Políticas Públicas de Telefónica; Juan Alfonso Herrero, Director de Asuntos Europeos de Mercadona; Ángel Mesado Jardi, Socio Director en 19N Strategies; y Piluca Núñez López, Directora de Comunicación y Relaciones Intitucionales en Asociación Empresarial Eólica.
María Rosa Rotondo agradeció a todo su equipo anterior el tiempo y la dedicación, un reto que también ha sido posible gracias al apoyo de numerosos socios y se dirigió a la Asamblea para presentar ofrecer un programa de actuación con las orientaciones más importantes para los próximos cuatro años. Entre los nuevas líneas de acción habló sobre el impulso y creación de Comités de Trabajo como forma de canalizar los intereses de los asociados como APRI Salud o el Comité Deontológico, que tiene como objetivo continuar y profundizar en la deontología y ética profesionales o el Comité de Profesión para canalizar todas las acciones de formación y de fortalecimiento de la reputación de la profesión. También propuso la creación de un Comité APRI Asociaciones, para canalizar las inquietudes y demandas de los profesionales que trabajan para asociaciones y organizaciones empresariales.
Asimismo, expuso los principales ejes estratégicos de su mandato:
- Corporate Advocacy con el objeto de promover una regulación de la profesión. En este eje se encuadrarán todas las acciones encaminadas a, por un lado, dará a conocer APRI a las grandes empresas y asociaciones y organizaciones del país, y por otro, incorporar la transparencia en las relaciones con los stakeholders corporativos en los Códigos de Buen Gobierno o Buenas Prácticas Corporativas.
- Regulación cuyo objeto será promover una ley nacional que regule las actividades de los grupos de interés lo más cercana posible a las posiciones de APRI, así como las respectivas modificaciones de los Reglamentos del Congreso y del Senado.También tratará de hacer seguimiento de las propuestas de las Comunidades Autónomas para intentar que se coordinen con la legislación del Estado en la materia.
- Comunicación. Se mantendrán las actuales líneas de actuación tanto en comunicación externa como interna, si bien se realizarán algunas mejoras como la renovación de la página web. Se trabajará para poner cara a la profesión, a través de encuentros periódicos. La Newsletter, que es nuestra principal herramienta de comunicación interna, se mantiene, con el fin de consolidar el sentimiento de pertenencia.
- Crecimiento. Se mantendrá el objetivo constante de consolidar el crecimiento de APRI aportando valor al asociado se realizarán actuaciones específicas para crear y ejecutar planes de presentación de APRI a las Empresas del IBEX, las grandes asociaciones patronales y las 10 ONGs más influyentes.
- Servicio al asociado. Dentro de esta área, se organizarán encuentros y eventos orientados a enriquecer la vida profesional de los asociados, como los tradicionales desayunos decisores políticos o jornadas sobre asuntos clave en perspectiva de gestión del ejecutivo y legislativo.
- Plan de Acción Cataluña. Se diseñará y ejecutará un Plan de Acción específico a cargo del Vocal de la Junta Directiva y Delegado en Cataluña.
El pasado jueves 27 de febrero en el Lobby Hour contamos con la participación del Ana Ramos Gallarín, Regulatory Engagement Manager para Iberia en British American Tobacco (BAT), y Águeda García-Agulló Bustillo, Directora General de la Asociación Empresarial del Tabaco (ADELTA) y presidenta de la Mesa del Tabaco. Ambas profesionales del sector y socias de APRI nos hablaron de la gestión de los asuntos públicos y el lobby en el sector del tabaco. Ana Ramos Gallarín explicó cómo mejora la regulación a través de una regulación inteligente, que armonice los intereses de todas la partes, aporte soluciones eficaces y valor al contenido y no tanto a la forma, es decir, de cómo legislar mejor en cada etapa del proceso legislativo y de formulación de políticas manteniendo un entorno económico atractivo y flexible para la actividad empresarial. Por otra parte, Águeda García-Agulló Bustillo explicó lo que era la Mesa del Tabaco y la importancia de dar voz y generar consensos de de todas las partes de la cadena de valor de un producto y servicios a la hora de abordar el lobby.
Ana Ramos Gallarín Regulatory Engagement Manager para Iberia en British American Tobacco (BAT)
Economista con más de 20 años de experiencia internacional en políticas públicas, regulación y lobby para gobiernos, asociaciones y compañías en diferentes sectores como tabaco, telecomunicaciones, transporte, energía, aseguradoras y salud entre otros. Antes de su incorporación en BAT trabajó como consultora en Analista Financieros Internacionales (Afi) y NERA Economic Consulting, y como investigadora en el Instituto de Estudios Fiscales (Ministerio de Hacienda).
Licenciada en CC. Económicas por la Universidad Complutense, Master en Análisis Económico por el Instituto de Estudios Fiscales, Máster en Gestión Pública por el Instituto Nacional de Administración Pública, MBA por el Instituto de Empresa y Postgrado en Inteligencia Económica por ICADE.
Águeda García-Agulló Bustillo Directora General de la Asociación Empresarial del Tabaco (ADELTA)
Directora general de Adelta y Presidenta de la Mesa del Tabaco. Durante los últimos cuatro años, ha dirigido el relanzamiento de la Organización Interprofesional Láctea (INLAC) y cuenta así mismo con una amplia experiencia en el ámbito asociativo del gran consumo, tras una trayectoria profesional de más de 16 años en consultoría en la multinacional Soluziona (Indra).
Licenciada en CC. Económicas y Empresariales por la Universidad Complutense de Madrid, ha realizado un PDD en el IESE, es Máster en Investigación de Dirección de Empresas, Marketing y Contabilidad por la misma universidad y ha realizado el programa de Poder y Contrapoder impartido por ESADE.
Sobre el Lobby Hour
El Lobby Hour es un afterwork dedicado a los profesionales del lobby, de las relaciones institucionales y de los public affairs. Nace en el año 2013 con el objetivo de aglutinar a los profesionales del sector y crear un entorno de intercambio de experiencias en el campo de los public affairs y relaciones institucionales
El lunes 24 de febrero tuvo lugar en las oficinas del Grupo LaBE en Madrid, la reunión del grupo de trabajo APRISalud. El grupo de trabajo APRISalud surge como iniciativa de un grupo de profesionales de las relaciones institucionales y asuntos públicos y miembros de APRI, cuyo objeto es el de poner en valor a los profesionales de los asuntos públicos (public affairs) y estrechar lazos entre los intereses públicos y privados en el ámbito de la salud, entendiendo como salud todo aquello que afecta al estado de bienestar o al equilibrio del ciudadano (sanidad, alimentación, consumo, políticas sociales, deporte, investigación, etc.).
APRISalud se constituyó en el 2019 y lleva a cabo una actividades de divulgación el papel de los profesionales de los asuntos públicos, también impulsa mecanismos para la formación de sus socios en el ámbito de la salud con cursos y desarrollo de casos de éxito que puedan servir para compartir experiencias y enriquecer la actividad, y ejerce a su vez labor de interacción con stakeholders institucionales (públicos y privados), a través de los desayunos APRISalud, trazando alianzas y colaboraciones que permitan un retorno positivo hacia la propia actividad.
En la reunión estuvieron presentes Irene Matías, Directora General de APRI; Verónica Somodevilla, responsable de Relaciones Institucionales de Italfármaco; Belén Codina Directora de Hiriscare, Adriana Bonezzi, External Affairs Manager en British American Tobaco; Carmen Peña, Presidenta de FIP; Pedro Claver, del Consejo General de Colegios de Farmacéuticos; Horacio Alemán de Thoffood; Ruth Pavón, Co-fundadora & CEO de LEVIN; Rita Gasalla, CEO de Galöw; Irene Tato, Vicepresidenta de AMREF; Ana Lázaro, Responsable de Relaciones Institucionales en BD; Jesús Díaz, Vicepresidente Ejecutivo del Instituto ProPatiens, y Antonio Ciardo, Jefe de Estudios en Philippus Thuban.